Recordando La Primera Cumbre Nacional Afrocolombiana
Los días 22 y 23 de noviembre de 2023, se realizará en Bogotá, Colombia, la Tercera Cumbre del Pueblo Negro, Afrocolombiano, Palenquero y Raizal, un encuentro de más de 600 organizaciones afrocolombianas de todo el territorio nacional. Hoy les invitamos a hacer memoria de este proceso, recordando aquella primera Cumbre Nacional Afrocolombiana. En entrevista con su coordinador Richard Moreno Rodríguez, nos compartió de sus inicios y las principales motivaciones que la impulsaron:
La cumbre es una estrategia política que nace en el 2020, cuando las organizaciones conformantes del Consejo Nacional Afrocolombiano (CONPA), reflexionaron sobre la importancia de que las diferentes expresiones organizativas del pueblo afrocolombiano se volvieran a encontrar. Fueron muchos los esfuerzos que ya habíamos realizado, hasta entonces, cada uno con diferentes nombres y en diferentes momentos de la historia: Conferencia Nacional Afrocolombiana, Congreso Nacional Afrocolombiano, Encuentro de Proceso de Comunidades Negras. Esto, y la necesidad de articularnos para apalancar temas de urgente interés nacional, nos llevó a que esta vez nos pensáramos en algo más grande, que nos incluyera a todos y todas; fue entonces cuando definimos que a estos encuentros le deberíamos dar la altura de una cumbre. Es así como la primera se realizó en octubre del 2021, en Cali.
La Primera Cumbre Nacional Afrocolombiana, fue una experiencia única e histórica. Tenía como primer objetivo ENCONTRARNOS, y lo logramos… más de 500 afrocolombianos y afrocolombianas de todos los lugares de Colombia, vinieron hasta Cali, hasta de lugares donde no se sabía que había gente negra. Un segundo objetivo fue reflexionar entre todos y todas en qué estado estaba el movimiento negro y definir colectivamente una agenda común para avanzar de manera efectiva; y tercero, saber cómo íbamos a participar como pueblo negro en la construcción de paz en los territorios, a partir del Capítulo Étnico del Acuerdo de Paz.
Lo que resultó de la cumbre estuvo más allá de las aspiraciones iniciales: resultaron ocho mandatos, que se convirtieron en la una ruta de acción que hoy nos guía, entre ellos: 1) Avanzar en la reglamentación de la ley 70 del 93; 2)en tener una plataforma de jóvenes negros; 3) En el acceso a los espacios de participación y representación; 4) en una propuesta de acceso laboral y de reactivación económica; 5) En impulsar la implementación de Capítulo étnico del Acuerdo de Paz; 6)construir propuestas de protección y autoprotección de las comunidades y organizaciones; 7) Desarrollar un plan de acción que atienda las diferentes problemáticas que afectan a las mujeres, la familia y las personas diversas del pueblo negro afrocolombiano, raizal y palenquero; y 8) Dinamizar la construcción de una gran Juntanza Nacional del Pueblo Negro, encargada de articular, desde los territorios hacia lo nacional, la interlocución con el Estado Colombiano y la comunidad internacional, partiendo de abajo, desde los territorios, desde regional, llegando a la nacional, una Juntanza que debería recoger las historias, los procesos, los resultados que hemos tenido en diferentes momentos, reconocer los valores que han dejado otras experiencias.
Este último mandato, el de la conformación de una Juntanza Nacional del Pueblo, nos desafiaba a recibir la solicitud de muchas más organizaciones a hacer parte de ella, por lo que planteamos unos criterios o principios básicos:
Primero: Que nos encontraríamos bajo la base de territorio y población, no estábamos creando una Juntanza para encontrarnos los mismos con las mismas, sino que uno de los principios era tener una base territorial y social.
Segundo: Tener respeto por la diferencia en la construcción de la unidad.
Tercero: La equidad de género, familia y generación, pero igualmente la participación de los diferentes sectores del pueblo negro. Más que activistas, se propuso que fuera un proceso colectivo que partiera de los territorios a lo nacional.
Esta primera cumbre además de dejarnos la tarea de impulsar estos mandatos nos interpeló a la necesidad de volvernos a encontrar, y este volvernos a encontrar era programar una segunda cumbre que hicimos en el 2022…
En una próxima publicación les compartiremos, en voces de sus protagonistas, algunas de las memorias de La Segunda Cumbre Nacional Afrocolombiana.