La Mesa de Negociación con el ELN no la podemos dejar caer
En Quibdó, se realiza este 7 y 8 de mayo, el encuentro Territorial Pacífico Norte, donde participa el Consejo Nacional de Paz Afrocolombiano – CONPA, como parte del Comité Nacional de Participación, en cabeza de su coordinador Richard Moreno.
El Comité Nacional de Participación, es una instancia especial articulada a la Mesa de Diálogos de Paz con el Eln, que se crea con la función de: Construir una propuesta de participación territorial de la sociedad, en el marco de los Diálogos de Paz, entre el Estado Colombiano y la guerrilla del ELN. Este comité es transitorio y no suple la participación en la negociación como tal, teniendo como tarea principal la de construir dicha metodología para presentarla a la Mesa de Diálogo que la adoptará de acuerdo a las realidades que se presenten.
El Comité Nacional de Participación durante dos días de trabajo, estará en Quibdó diseñando de forma participativa dicha metodología para el Pacífico, que se espera contribuya a garantizar la participación de esta región, en lo que serán los Diálogos de Paz entre el Estado colombiano y la mesa del ELN.
Ante el momento de incertidumbre que viven los Diálogos de Paz, en su intervención, Richard Moreno, dio un parte de esperanza, e invitó al Pacífico a rodear el proceso:
“Yo estoy convencido que pase lo que pase la Mesa de negociación no se va a caer, ni se va a acabar. Si no existieran las crisis en este proceso, estoy seguro de que se rompería en el último momento, pero como hemos tenido crisis, y en cada una de ellas la Mesa de Diálogo ha salido fortalecida, estoy convencido que antes que este gobierno termine, deberá existir un pacto, o una negociación entre el ELN y el Estado Colombiano, y que eso va a disminuir las violencias, y va a garantizar más oportunidades al Pueblo Colombiano. Pero, para que eso pase, es necesario que cada hombre o mujer, cada ser humano, entendamos que hay que acabar la radicalización y polarización que hoy tenemos como sociedad. Los que están liderando esa radicalización y polarización no tiene hijos ni en la guerrilla, ni en los paramilitares, ni en el ejército, ni en la policía, y si los tienen están estudiando fuera del país para venir a gobernar a Colombia.
Los que tenemos hijos e hijas que los están matando en la guerra, tenemos la responsabilidad de no descansar en busca de la paz, y recuerden que la paz que ha propuesto este gobierno no es solamente silenciar fusiles, la paz propuesta se denomina la Paz Total, que no solamente es negociar con los actores que están alzados en armas, sino con otros sectores políticos, económicos, que de una u otra manera, tienen o han tenido niveles de responsabilidad en el empobrecimiento que tiene el país, en la insatisfacción de los derechos de la gente, pero también en los fenómenos de violencia que se generan.
La misma situación de violencia y conflicto armado que vive el país y que vive el Pacífico, y el Chocó, - especialmente-, nos obliga mucho más a que en lo individual y colectivo trabajemos en función de la construcción de la paz. Nosotros y nosotras tenemos la responsabilidad de no descansar hasta que este proceso con el ELN termine felizmente, y todos los procesos de negociación, de sometimiento y acogimiento que se presenten con otros actores, porque al final, somos (Región Pacífica) los que sufrimos las peores consecuencias”.
Quibdó, Chocó, mayo 7 de 2024.